Tener una sonrisa blanca es una de nuestras grandes preocupaciones a nivel estético. Tradicionalmente, todo aquel que deseaba una sonrisa más blanca acudía a la clínica dental para realizarse un tratamiento de blanqueamiento, pero lo cierto es que en la actualidad han surgido multitud de alternativas.
Mucha gente opta por blanquear sus dientes con remedios caseros o con productos de dudosa efectividad y/o seguridad. ¿Por qué no es aconsejable recurrir a estos métodos y es mejor ponerse en manos de un profesional? Desde la clínica dental Argarate en Donostia-San Sebastián te damos la respuesta.
El blanqueamiento en la clínica dental es un método seguro
Los blanqueadores dentales “caseros” como el bicarbonato, al igual que las pastas dentales o bandas blanqueadoras, han ido ganando cada vez más seguidores, pero lo cierto es que se tratan de métodos no seguros que pueden poner en riesgo la salud de nuestros dientes.
Esto se debe a que pueden estar compuestos de métodos abrasivos que dañan nuestro esmalte de manera irreversible, ya que el esmalte es el único tejido del ser humano que no se regenera.
Es necesario un dentista profesional que guíe el tratamiento
A la hora de comenzar un tratamiento de blanqueamiento, es fundamental que un profesional valore tu tipo de esmalte, el grado de permeabilidad, que determinará tu nivel de sensibilidad dental, que estudie tus hábitos diarios… ya que son variables que influyen mucho en el resultado del blanqueamiento.
Además, hay que tener en cuenta que ciertos pacientes, como aquellos que padecen problemas de encías, pueden desarrollar sensibilidades importantes al tener las raíces descubiertas, por lo que necesitarían un protocolo distinto al de una persona con las encías sanas. Cada paciente debe ser valorado individualmente y planificar un tratamiento atendiendo a sus necesidades personales.
Los resultados pueden no ser los esperados
Las sustancias blanqueadoras que contienen los productos caseros son las mismas que se utilizan en la clínica dental, pero en una proporción tan mínima que realmente no producen un efecto destacable. Los otros compuestos abrasivos de los que están formados, sin embargo, son productos que rayan el diente y por ello provoca que parezca más blanco. Sin embargo, lo único que hacen es aclarar un poco el tono, sin llegar a conseguir efectos estéticos reales.
Si estás pensando en mejorar el aspecto de tu sonrisa, en la Clínica Dental Argarate en Donostia-San Sebastián ofrecemos tratamientos de estética dental como blanqueamiento y carillas dentales que te ayudarán a alcanzar el resultado dental.